La contratación de un entrenador personal es una decisión muy importante ya que va a tener una clara influencia en tu salud y tu condición física, y el acierto o no a la hora de elegir puede hace que consigas tus resultados o que te quedes por el camino.
Estas son las 6 cosas que has de sopesar
1- Precio
Es una clara barrera en la mayoría de la gente a la hora de decidirse por contratar a un entrenador. En este punto hay que tener en cuenta que no hay que verlo como un mero gasto, sino más bien como una inversión en salud y sobretodo en calidad de vida.
Puede ser de utilidad a la hora de hacer cálculos contar cuánto me va a costar al mes un entrenador y compararlo con cuánto gasto en caprichos o cosas de las que podría prescindir.
Es importante saber que un entrenador personal es un profesional de la salud, esto significa que hay un precio mínimo que hay que pagar para obtener un servicio de calidad. No hay que caer en la trampa de buscar el mejor precio, hay que plantearse qué hay detrás de ese precio.
Un profesional que se pague sus formaciones, invierta en material, en tiempo dedicado a cada cliente no puede costar 20€ por sesión. Recuerda que es una inversión en salud, no te la juegues contratando a cualquiera.
2- Disponibilidad
Es evidente que hay que tener en cuenta que el entrenador tenga la agenda libre para los horarios y días que te encajen. Pero hay que ir un poco más allá. Está bien saber si tiene muchos clientes o si por el contrario tiene muchas horas libres. Que tenga una agenda ocupada puede darnos una idea de su calidad como entrenador así como saber si tiene una alta rotación de clientes o por lo contrario los clientes son estables. Si es así seguramente quiera decir que están contentos con su servicio y tienes más posibilidades de acertar.
3- Formación
El entrenamiento físico forma parte de la salud, que es una ciencia, y como tal es objeto de estudios y avances científicos. Es obligación del profesional mantenerse actualizado y formado dentro de su ámbito y es algo que como cliente has de exigir. Fíjate en cuáles son los últimos cursos realizados y si son recientes o de hace varios años.
4- Dedicación
El ámbito del fitness y el ejercicio físico es un sector muy vocacional, donde la dedicación y la pasión por el deporte y la salud tienen que ser el principal motivo de ser entrenador. Busca un profesional que se dedique 100% al fitness y que sea su modo de vida y su profesión.
5- Especialidad
Bajo mi punto de vista, no se puede ser bueno en todos los ámbitos. Apuesto por la especialización de los profesionales y la derivación entre ellos como trabajo multidisciplinar. Esto significa que debería s buscar aquel entrenador que más se adapte a tus necesidades, que tenga formación específica en el ámbito que busques y que se haya especializado en un perfil de cliente acorde contigo. Es raro encontrar a un entrenador-nutricionista-masajista-coach que sea bueno en todo.
6- Recomendaciones
Hoy en día las redes sociales, la publicidad e internet hacen que publicitarse esté al alcance de todos. Esto puede llevar a confusiones o engaños y a veces acabamos contratando a un entrenador porque tiene mejor web o por sus ofertas. Hay algo que no falla nunca y es el boca a boca, las recomendaciones de clientes que ya estén entrenando con él serán mucho más fiables que una publicidad.
Ahora ya puedes tener un mayor criterio para contratar al profesional que te ayude en tus objetivos
«Ayúdame a hacerlo por mí mismo» Maria Montessori
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